El programa de exploración espacial Voyager, que originalmente envió dos naves espaciales para explorar Júpiter y Saturno, celebro sus 35 años desde su lanzamiento. Y, según la NASA, casi como una forma de celebrar la hazaña el Voyager 1 entró en una región distante del sistema Solar, la cual puede ser la frontera para que la misión alcance el espacio interestelar.
Según la publicación, Voyager 1 llegó a una región que, debido a la alineación entre el campo magnético solar y el campo magnético interestelar, se llama «carretera magnética» (Magnetic higway). Esta alineación permite que las partículas cargadas procedentes de la heliosfera, una especie de burbuja formada por el campo magnético solar, escape al espacio interestelar y que las partículas presenten en este espacio penetren.
La NASA cree que, una vez que la nave supera esa barrera, la dirección del campo magnético probablemente cambiará, permitiendo que sea posible determinar el momento exacto en que la Voyager 1 entre en el espacio interestelar. La Voyager 1 es el objeto construido por el hombre que está más lejos de la tierra, habiendo viajado casi 18 billones kilómetros, y su entrada en el espacio interestelar puede tomar unos meses a un par de años.
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