Después de 30 años de dejar la Tierra, la sonda Voyager I ha llegado a una región completamente desconocida para los científicos. En 1977, la administración del Presidente Jimmy Carter fue responsable de enviar las sondas Voyager I y II al espacio. El objetivo era investigar los planetas Júpiter y Saturno y, en caso de que el equipo sobreviviese, fuese capaz de seguir adelante y enviar los datos más relevantes a la tierra.
La Voyager II llegó a Neptuno en 1989, mientras que la Voyager I terminó siendo expulsado por la gravedad de Saturno en una trayectoria que la envió a lo más lejano de nuestro sistema Solar. Ahora, la prensa internacional advierte que la primera sonda finalmente ha alcanzado los límites de nuestro sistema solar.
Ahora, los astrónomos del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA anunció que la sonda envió datos que muestra los cambios drásticos en la medición de la radiación, lo que indica que la Voyager I entró en una región desconocida del espacio, estando lejos del campo de acción de las partículas emitidas por el Sol.
En diciembre del año pasado, los científicos ya habían anunciado que esto podría ocurrir dentro de unos meses o años y, al parecer, llegó el momento. Ahora, los datos enviados por el Voyager serán extremadamente valiosos para los investigadores, Puesto que la sonda está en una región totalmente desconocida y monitoreados por primera vez.
Los límites del sistema solar
Aunque el informe de prensa declaró inicialmente que la sonda Voyager I había dejado el Sistema Solar, la NASA ha querido fortalecer recientemente que esto puede no ser el caso. A diferencia de la Tierra, el Sistema Solar no tiene fronteras bien definidas y por lo tanto no sería correcto, científicamente hablando, alegar dicha declaración.
Hasta el momento, la información difundida por la agencia espacial se limita a decir que la sonda se encuentra en una región inexplorada del espacio. ¿Cuál es, en la práctica, significa que ella está tan lejos que no deja de ser intrigante.
Vía Time
